Trabajo remoto: qué es y su impacto en el mundo laboral.

La Modalidad Mixta es una forma de trabajo en que se complementa el trabajo a distancia con el trabajo en oficina, en la que parte o totalidad de las actividades relacionadas con el empleo se realizan en un lugar que no es la oficina del empleador, siendo posible gracias a las tecnologías de la información y comunicaciones (TIC). Aunque muchos creen que es algo novedoso, esta ha sido una elección por décadas para otros.

Una oportunidad en tiempos de crisis:

Con la crisis energética que afectó a numerosos países en 1973, varías empresas reorganizaron su forma de trabajar con el fin de reducir costos y el trabajo a distancia surgió como una opción para evitar los desplazamientos. Los avances tecnológicos facilitaron la implementación del trabajo a distancia y se volvió más común por sus ventajas.
Sin embargo, la presencialidad continuó predominando dentro de la cultura laboral y no es hasta comienzos de la pandemia, en que los estigmas existentes sobre el trabajo a distancia se dejaron a un lado para responder a la emergencia sanitaria que enfrentaba la sociedad.

El trabajo a distancia durante la pandemia del COVID-19:

La propagación del COVID-19 llevó a tomar medidas de distanciamiento en todo el mundo, lo que condujo al cierre de espacios para limitar el contacto social, y así minimizar el riesgo de contagio. El trabajo a distancia se impuso como alternativa para mitigar las consecuencias y el impacto económico de la pandemia.
Antes del 2020, en Latinoamérica y el Caribe, un 3% de los trabajadores desempeñaban sus funciones a distancia. Para 2022, dentro de la misma región, este porcentaje se eleva hasta un 33%. La oferta laboral remota se ha triplicado; evidenciando la gran cantidad de compañías que hicieron la transición, y que después de 2 años de emergencia sanitaria, la mantienen como nueva forma de organización.

Transformación de la cultura laboral para implementar el trabajo a distancia:

Instaurar el trabajo a distancia no solo implica enviar a los colaboradores a su casa o al lugar que estimen conveniente para la prestación de sus servicios, también es necesario modificar cómo se organizan y relacionan. La distancia dificulta la comunicación, por eso se deben definir canales efectivos, que permitan el seguimiento de cada rol, así como cubrir sus expectativas y requerimientos.
Otro aspecto por considerar es la visión del horario laboral. Hay que establecer metas medibles, basadas en expectativas de tiempo y no un horario fijo. También es importante que el empleado cuente con herramientas óptimas y formación tecnológica, así como un nivel de autonomía que no requiera constante supervisión.

Ventajas y desventajas del trabajo a distancia:

El trabajo a distancia elimina las fronteras, amplía las oportunidades de empleo y el pool de talento se extiende para las organizaciones al momento de reclutar.
En el caso de los trabajadores, les brinda una mayor flexibilidad horaria, reducción de tiempo y gastos de movilización, además de facilitar la integración de la vida laboral y privada. Estas ventajas incentivan la productividad, sin embargo, el sedentarismo y aislamiento representan un riesgo. La pérdida de un ambiente diseñado para el desenvolvimiento laboral, y la falta de disciplina, pueden afectar el desempeño.
Las empresas, por otro lado, reducen sus costos logísticos, de infraestructura, y ayuda en la retención del talento. Esta modalidad conlleva un menor control del trabajador; y sin los métodos adecuados, no es posible la medición de la productividad o el rendimiento de los empleados.
La pandemia cambió la forma en que comprendíamos nuestro espacio laboral y sin duda el trabajo a distancia tomó la delantera, representando más allá de un modelo de trabajo, un estilo de vida para muchos.