Cualquier empresa o compañía se puede convertir en organización azul

“Entender y practicar la sencillez te sitúa más cerca de convertirte en organización azul”

Ser azul se está convirtiendo en un imperativo para los líderes de la era actual. Las 8 competencias son un marco de transformación que puede ayudar a cualquier organización a avanzar hacia su máxima competitividad, siendo este marco un referente para el management del momento, dejando de lado, lo innecesario, superfluo y estéril.

  “Evolucionar significa ser puros, auténticos, explotar y explorar”

Soy consciente que estos procesos de cambio no son fáciles, vienen iniciados por procesos de urgencia, que generan nerviosismo y desazón. Donde cobra importancia la necesidad de estar preparados, y el rol de los lideres adquiere relevancia, proporcionando claves necesarias para la obtención de mejores resultados en sus organizaciones, desde las personas, para las personas.

“Liderar desde las personas y para las personas, nos ayuda a desarrollar equipos de alto rendimiento en la organización”

  Los cambios que se han producido en los últimos años, han puesto de manifiesto que esta revolución tecnológica, necesita de nuevos modelos empresariales no tan basados en jerarquías departamentales.  

El modelo de organización industrial basado en la necesidad de dividir el trabajo, estandarizando procesos y funciones, ha creado enormes cantidades de riqueza; ha sido un elemento fundamental para la formación de empresas y, en definitiva, para del auge de la economía de libre mercado. Las personas han colaborado en la creación de riqueza de manera eficiente en este tipo de organizaciones, con tal éxito que consideramos prácticamente imposible estructurar las empresas de otro modo. Sin embargo, sí existen otros modelos organizativos, aunque nos cueste imaginarlos, centrados en menos control y más confianza

“Desde la confianza multiplicamos x3 el rendimiento”

  Desde la posición que nos otorga el haber pasado dos años frenéticos y haber entrevistado a más de 200 empresas, nos atrevemos a decir sin equivocarnos, que las organizaciones necesitan un equilibrio entre el hoy y el mañana, entre la continuidad y el cambio, entre lo predictible y volátil, entre la eficiencia y la creatividad. Todas las empresas se enfrentan a dos grandes retos que explican de buena manera su actuación. Toda actividad empresarial se basa e inicia en la detección de una oportunidad de negocio que merece ser explorada y la posterior explotación de esa oportunidad, sirviendo a los clientes de manera sostenida con una operación óptima.

“Encontrar el equilibrio entre continuidad y cambio exige de aprendizaje desde dentro de los equipos”

Necesitamos rodearnos de talento positivo, ya que nos da fuerza, velocidad y resistencia y, nos aleja de la negatividad, que nos frena, fatiga y deprime. Transformar no es proponer, transformar es escuchar, aprender y actuar. Transformar es compromiso en los cambios, y actuar para que se hagan realidad. Ese es nuestro compromiso, esa es nuestra realidad.

“El compromiso está en convertir palabras en hechos, aun a sabiendas que me puedo equivocar”

Todas las empresas queremos cambiar y crecer, pero para hacerlo con éxito debemos pensar en hacerlo de forma paulatina, continua, con un propósito claro y compartido. Debemos entrenar nuestras formas de liderazgo, desaprender algunas de ellas, y disponer de gente que apueste por nosotros, arriesgue por nosotros y que impulsen cambios relevantes.

“Empecemos el proceso desde la crítica, ser crítico con todo lo que hacemos, nos hace repensarnos hasta lo que mejor funciona”

Nuestro foco como directivos, es centrarnos en el cliente y las personas, donde no burocraticemos lo innecesario y aportemos mecanismos para poder adelantarnos a los acontecimientos, reaccionando ante ellos con claridad y acción.

Evolucionar o desaparecer: tú decides